Nuestra Gente: La ‘dulce’ historia de Maribel Vanegas, productora de panela en Cundinamarca

Maribel ha dedicado toda su vida a la producción de panela natural en la vereda La Chácara, de Beltrán, Cundinamarca.

(Cundinamarca, 8 de mayo de 2023). A orillas del imponente río Magdalena, en el occidente de Cundinamarca, se encuentra Beltrán, un municipio de gente pujante que refleja lo mejor de nuestro departamento. Una de estas personas es Maribel Vanegas, una mujer de campo que desde pequeña le puso corazón y ganas al trabajo de la producción de panela natural; toda una vida dedicada a esta labor.

“Yo crecí en los cañizales, mis padres trabajan la tierra sembrando caña de azúcar y eso fue lo que les aprendí. Ellos me heredaron este oficio”, cuenta Maribel.

Al ser una herencia de familia, Maribel no ha querido que esto pare allí, pues también le ha enseñado este oficio de vida a sus hijos, quienes, junto a ella, trabajan a diario para sacar un producto de calidad que, además, es su principal fuente económica: “mis hijos también han aprendido a cosechar la caña, ya que este es uno de nuestros ingresos”, complementa.

Debido a que el proceso de elaboración de la panela consta de varios pasos, Maribel y su familia también han sido generadores de empleo, ratificando que nuestro campo cundinamarqués es generoso con todas las personas que buscan trabajo en él.

“La elaboración de la panela es complicada porque se necesitan varias personas: está quien matiza el horno, quien muele, quien hace la cocción y el que moldea el producto final. Es un proceso que hacemos cada 15 días y ya todos lo sabemos de memoria”, puntualiza.

Y es que la clave para obtener un producto de calidad es asegurarse que cada uno de los insumos involucrados en la producción estén debidamente preparados, lo que requiere de cuidado y dedicación en todo el entorno. Maribel tiene claro todo lo que importante gracias a la experiencia que le han dado los años.

“Debemos preparar la tierra y escoger la mejor semilla, posteriormente, se realiza la siembra y se tapa totalmente. Cuando nace la planta, se le hacen tres ‘limpias´ en el año; el abono que se usa en el proceso es orgánico y la preparación es casera. También utilizamos el bagazo de caña para retener la humedad y se usa ceniza para ahuyentar hongos o insectos que puedan dañar la planta”, dice Maribel.

La familia Vanegas elabora una panela única y exclusivamente con los insumos naturales que la tierra de Cundinamarca brinda, una razón más para reconocer la importancia de nuestro campo.

“El producto que fabricamos es 100% natural, cero productos químicos. Los beneficios que pueden obtener las personas que lo consumen es que no le hace daño a su salud o a su organismo. No afecta a las personas con diabetes, por ejemplo”, explica.

Para el municipio de Beltrán, Cundinamarca, que además tiene gran capacidad agrícola y ganadera, la producción de la panela representa una importante fuente económica, ya que el clima es ideal y muchos campesinos viven de estos cultivos.